RYDER CUP (II)
El nombre Ryder Cup es en recuerdo
del apellido de un comerciante – Samuel
Ryder – al que su médico recomendó que practicase golf por motivos de
salud. Samuel renuente a seguir los consejos del doctor, decidió un día asistir
como espectador, a un torneo “no oficial” entre el público. Quedó seducido por
este deporte. Empezó a practicarlo a los 50 años. En poco más de dos años,
arregló sus problemas de salud, consiguió un hándicap de 6 u 8 (no recuerdo
bien). Tan agradecido estuvo, que decidió esponsorizar un campeonato bianual,
regalando también, el trofeo: la copa de oro que todos hemos visto.
José Mª Olazábal:
“Esta victoria significa mucho, no sólo para mí, sino para todo el golf
europeo, para estos 12 fantásticos jugadores, los cuatro vice capitanes, los
cadies: es el triunfo de toda Europa”. Sigue hablando de sus magníficos
jugadores, con mucho respeto, por la tenacidad en darlo todo en el campo. La
frase que estaba en el Team Room de la Casa Club Medinah (Chicago)era: “Los
ganadores no esperan su oportunidad; salen a buscarla”. Según Olazábal, los dos primeras jornadas fueron desalentadors; “llevábamos dos días,
que no metíamos un putt, y los americanos, todos. El partido de Justin Rose y
Sergio García fue clave”.
Dos campeones en la Ryder Cup (Getty Images) |
Sergio
García como ser “humano” que es, en el último par de años, ha tenido algún
altibajo deportivo; sin embargo, por el coraje y pundonor que adorna su
carácter, le hizo ganar la Copa Whyndham (1ª victoria en EE.UU. desde
2008), para hacer puntos y ser llamado
por Olazábal.
En la edición 2012, Miguel Ángel
Jiménez ha sido vicecapitán junto a Thomas Björn, Darren Clarke y Paul
McGinley. Sospecho, que han trabajado codo a codo, para conseguir- como así
ocurrido- que la copa volviese un año más al continente.
Creo, que este
año, la victoria de Europa en la Ryder Cup - capitaneada por J.M. Olazábal - ha
sobrepasado el ámbito de “golfistas” y periodistas deportivos, para llegar a la
“calle”.
La noche del
sábado ( hora española), en twitter una chica preguntaba: ”Si los de la Ryder
Cup ganan, ¿también los meterán en un autobús y los llevarán a la Almudena?.
Sinceramente, me alegré mucho de la pregunta significaba para mí, que el golf
empezaba a calar en el personal.
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